Historia: Rodrigo Roa.
En memoria de Don Abraham Suárez.
I
- Sr. Thomas, la niña ha cumplido lo solicitado. Los insectos ya recorren el mundo – explicaba Puma.
- Excelente, muchachos. Lady Bug es muy valiosa, se los dije… Ahora pueden descansar - respondió Ian Thomas, dueño del laboratorio RadioGen, y director del Proyecto R-Evolución – Además, todo va muy bien encaminado… Hace unas horas, encontré la respuesta a la más grande de mis preguntas, y nuestros otros agentes ya se movilizan…
Puma y Ámbar asintieron en aprobación, y dieron media vuelta, alejándose. Ian Thomas no paraba de sonreír, incluso varios minutos después, cuando ya nadie lo veía…
Pero súbitamente, todo cambió. Una violenta explosión en la pared del edificio, y del otro lado, el R.Squad en pleno, listos para luchar por el rescate de su compañero…
II
Tres horas antes.-
- John Merrick. Nombre clave, Ugly Boy. Todo en ti transpira ridiculez, desde tu nombre de héroe hasta tu apariencia… Me das asco… - las palabras de Ian Thomas eran duras, tratando de quebrar la voluntad del miembro del R.Squad.
Las horas se habían hecho eternas allí para el radialterado, pero algo en su mente sabía que sus amigos no lo dejarían allí, en manos de estos sujetos. Estaba completamente conectado a una especie de procesador, con cables en su cabeza, agujas pinchando su cuerpo, y apretadas amarras en sus extremidades.
- Pero, ¿sabes? – continuó Thomas – Eres valioso para nuestros planes. Tú puedes entregarnos la solución al puzzle genético en el que estamos… ¿Qué puedes decirme de estas fórmulas?
Ugly Boy veía borroso, pero sentía su cabeza abierta, como si los cables que tenía conectados en su cuerpo, estuviesen penetrando hasta lo más profundo de su psiquis, y como si la sustancia que le inyectaban las agujas estuviese afectando su juicio.
- No podrás resistirte, John. Esta máquina extraerá hasta tus pensamientos más ocultos. Sé que tu puedes resolver este problema… dime… ¿cómo completo la fórmula?
En sus pantallas, la máquina mostraba las pulsaciones, las ondas cerebrales, y prácticamente todas las funciones vitales de Ugly Boy. Además, cada unos 20 segundos, recibía una pequeña descarga eléctrica que lo hacía temblar de dolor, y un profundo pinchazo de las agujas.
- Me dirás exactamente dónde puedo encontrar esta estructura genética, para replicar las partes faltantes de la fórmula… Sé que existe alguno de los tuyos que es la respuesta… ¡Habla, ahora!
- No… no lo… haré… ¡¡aaargh!!
- Oh sí, sí lo harás – dijo Thomas, exaltado – No hay escape, no te ayudarán. El suero hará que digas lo que necesito, ¡lo dirás!
Ugly Boy trataba de resistir el dolor, pero incluso sus sentidos ya percibían de manera difusa, su lengua estaba entumecida, su garganta seca, y hasta sus gritos eran ahogados por una semi inconsciencia.
- ¡Maldito deforme, habla! ¡¿Quién es?! ¡¿Quién tiene la estructura biológica que necesito?!
John Merrick ya no pudo resistir más, y a pesar de que no era por su propia voluntad, no pudo detener su boca cuando desde ella, casi como un suspiro, surgió un nombre.
- L-Luz…
De inmediato, Ian Thomas comprendió. Salió del salón, con órdenes para todos sus hombres de confianza, y con una misión muy especial para un grupo en particular.
- Alerten a The All-Americans. Iremos por el radialterado conocido como Luz.
III
Ahora.-
- ¡Thomas, entréganos a Ugly Boy! – dijo Liebre, con decisión.
- No se engañen, muchachos, no hay escape de esta situación… Su amigo ya me ha entregado la información que necesitaba. Mis agentes ya están en acción… - dijo Thomas, con cierta arrogancia – Desde hace mucho, estamos dos pasos delante de ustedes.
Liebre no supo qué responder. Ian Thomas tenía razón, aunque no tenía plena certeza de lo que estaba ocurriendo. El R.Squad y los demás héroes habían descubierto sólo la punta del iceberg… y lo habían hecho demasiado tarde.
- ¿Qué harán? Han perdido apoyo en su ciudad, están desorientados, y basta que apreté un botón para que los hombres de R-Evolución vengan aquí, y los saquen a patadas.
“¡PERO NO, NO LO HARÁS!”, se oyó súbitamente, con una voz que resonó como un potente eco en todo el edificio, y en las cabezas de los presentes
Un leve temblor sacudió sus cuerpos, seguido por el ruido metálico de algo rompiéndose.
En el fondo de la sala, John Merrick, Ugly Boy, se había zafado de sus ataduras, y descendía lentamente al piso, flotando. Sus ojos brillaban, y su cuerpo parecía un poco más alto y más robusto, imponente.
Ian Thomas no podía moverse, como si su mente recibiera la orden de no hacerlo.
- No más burlas, no más humillación; ahora soy The Ultimate Man. Dejarás que nos vayamos, Ian Thomas. No harás nada más mientras yo esté cerca.
Efectivamente, el empresario genético no hizo nada mientras el R.Squad huía, junto a John Merrick, ahora llamado The Ultimate Man.
- ¡¡Podrán huir ahora, pero no de lo que viene!! – gritó Thomas, con la desesperación propia de estar completamente inmovilizado.
Pero a pesar de lograr su escape, los miembros del R.Squad sabían que lo más peligroso ya estaba en marcha, y debía ser detenido…
IV
- ¿Qué sucedió allí, John? – preguntó Chica Metálica, su amada, mientras viajaban a su nuevo hogar.
- Él me torturó, y utilizó una máquina para extraer la información biológica compatible con un proyecto al que llamó “AHB-42” – explicó The Ultimate Man – Con su método, no pude evitar revelarle que Luz era el ente biológico de mayor compatibilidad con lo que buscaba.
- ¿Y contigo, qué pasó? ¿Cómo hiciste todo eso? – volvió a preguntar la chica.
- Hice un esfuerzo consciente extremo por acceder al sector subutilizado de mi cerebro. Con ayuda de mi subconsciente, logré despertar ese amplio porcentaje que se encuentra dormido en el ser humano promedio – explicó.
- Así que, si lo entiendo bien… - afirmó Metaboy, esperando una confirmación - Ahora no sólo eres el hombre más inteligente en la Tierra, sino que también tienes nuevas habilidades telepáticas y telekinéticas… por eso eres “el hombre definitivo”…
- En cierta medida, sí…
Mientras, los líderes del grupo, Liebre, Oso y Águila, escuchaban la conversación a medias. Sus mayores preocupaciones eran otras. Debían establecerse en su nuevo hogar, en Ciudad de México, pero sobre todo, debían adelantarse a los próximos movimientos del Proyecto R-Evolución.
- Debemos encontrar a Luz, y rápido – dijo Águila.
- Así es - replicó Liebre – Y creo saber quién puede buscarlo. Oso, comunícate con Grandmaster. Necesitamos a The Resilience.
Epílogo.
Ian Thomas volvió en si cuando The Ultimate Man y sus compañeros se habían alejado lo suficiente para no ser alcanzados. Aún así, de inmediato reunió a los radialterados del Proyecto R-Evolución, y a otros de sus hombres.
- Muchachos, escuchen todos. Es la hora clave – les dijo – Dentro de las próximas semanas haremos nuestros movimientos, y no deben haber errores. Ya todos saben su función. ¡Manos a la obra!
Un estruendoso grito conjunto se oyó en RadioGen, con decenas de hombres y radialterados vitoreando.
Los radialterados se reunieron en un sector, liderados por Puma y Ámbar, mientras los científicos acompañaron a Ian Thomas a un salón apartado.
- Debemos tomar precauciones – dijo el empresario – Me gusta ser precavido… así que, doctores, cuéntenme de ese procedimiento de adquisición de habilidades… Me interesa bastante la electricidad…
Continúa en IMPERIO: THE RESILIENCE.
_
No hay comentarios:
Publicar un comentario